Fiestas Patrimoniales
Las Fiestas Tradicionales: Un recorrido por las manifestaciones culturales de los cuatro mundos en Ecuador
Las fiestas tradicionales en Ecuador se pueden identificar como ancestrales o indígenas, y tradicionales mestizas. Entre las primeras se destacan las fiestas de los equinoccios y solsticios, que en la época colonial fueron insertadas en el calendario católico como la fiestas del Carnaval previo a la Cuaresma, la fiesta del Inti Raymi, que se celebra en el mundo Andes, la misma que arranca con la fiesta del Corpus Cristi, las fiestas de San Juan y de San Pedro, en el norte de Pichincha; y, la fiesta de la Jora y del Yamor en Imbabura.
Mientras que las fiestas tradicionales mestizas, por su riqueza simbólica y sus implicaciones histórico-culturales, se puede destacar: la Diablada de Píllaro, el Carnaval, la Semana Santa, la romería de la Virgen del Cisne en Loja, la Romería a la Vírgen del Quinche, la fiesta de la Mama Negra en homenaje a la Virgen de las Mercedes en Latacunga, los Rodeos Montubios de las provincias de Guayas y Los Ríos en el Mundo Costa, el Pase del Niño en Cuenca, y los Años Viejos en todo el país, donde la creatividad popular se evidencia en la construcción de ingeniosos muñecos de cartón y papel, que a media noche del 31 de diciembre son quemados entre de múltiples rituales, alborozo y alegría, para recibir al Nuevo Año con promesas y buenos augurios.
Cada una de estas manifestaciones culturales por su historia, tradiciones y costumbres, se han convertido en un gran atractivo turístico y por lo tanto hacen parte de la fortaleza cultural que tiene el Ecuador para compartir con el mundo.
La Diablada Pillareña
El Diablo no es uno solo. En Santiago de Píllaro, al norte de la provincia de Tungurahua, salen por miles en la conocida Diablada Pillareña. Esta festividad se desarrolla del 1 al 6 de enero de cada año y reúne a todo el pueblo pillareño. Participan hombres y mujeres de diferentes edades y condición social. Cualquier persona puede disfrazarse de diablo, incluso los extranjeros.
El origen de la Diablada Pillareña viene desde la época colonial y se deduce que fue la rebeldía mestiza e india contra la religión Católica, lo que dio origen a esta fiesta. Los indios se disfrazaban de diablos en repudio a las prédicas sacerdotales y al maltrato físico, económico, sicológico y moral que recibían de los españoles
Cuenta la leyenda que en esta localidad, los habitantes del barrio Marcos Espinel acudían a cortejar a las mujeres de Tunguipamba. Los padres y hermanos, molestísimos al enterarse de tal afrenta, querían dar un escarmiento a los galanes y, por ello, no encontraron mejor manera que aprovechar la oscuridad y disfrazarse con máscaras con cuernos, como los acólitos del diablo.
Otros dicen que al finalizar la década de los cuarenta, en fiesta del Día de los Santos Inocentes, salía a las calles del pueblo la “Legión”, un variopinto grupo de personajes. Estaba el Cíclope, el Duende, la Muerte, el Alma, la Caja Ronca, el Dos Caras, la Loca Viuda, el Uñaguille y el Diablo. Se dice que este último personaje se tomó como referencia para dar origen a los “Diablos” de Píllaro.
Hay una versión que afirma que al inicio del nuevo año, que coincide con la fiesta de los inocentes, los pobladores de Píllaro creen que el cielo se abre y por ello realizan un ritual en el que llegan al límite de su comprensión, de su poder de resistencia y mentalidad. Esta práctica les da fuerza y poderes sobrenaturales. Se disfrazan y llevan una máscara que se asemeja al ser que más temen; danzan para mofarse, para tener el control sobre el maligno. Una tercera fuente atribuye el origen de esta particular fiesta a los mitimaes de origen boliviano que seguramente dejaron su rastro aquí, por la coincidencia de los personajes con la Diablada del Carnaval de Oruro.
Sea lo que fuere, la conocida Diablada Pillareña, Patrimonio Cultural Intangible del Ecuador desde enero del 2009, es una celebración popular que año tras año incorpora a más comunidades y diablos adeptos. Las máscaras se elaboran artesanalmente sobre la base de un molde hecho en bloque de tierra al que se le adhieren varias capas de papel couché empapadas en engrudo. Se deja la máscara al sol para que adquiera dureza. Luego se añaden cuernos y dientes de diferentes animales: cabras, venados, corderos, toros, etc. Al final se otorga el color, pero sobresalen las tonalidades negras y rojas.
Sus trajes son también multicolores y se distinguen los elaborados en tela espejo o satín, acompañados con vivos o flecos que contrastan con el color del traje. Muchos llevan capas con diferentes leyendas alusivas al demonio, lucifer o el maligno. En la parte superior de la cabeza usan una coronilla elaborada con cartón prensado y forrada de papel celofán. Otros portan pelucas hechas con pelaje de animales o de cabuya, aunque hoy estos elementos han sido reemplazados por pelucas, sombreros o paja plástica.
Explosión de alegría
Con varios meses de anticipación se busca a la banda de músicos que acompañará a los danzantes. Los diablos bailan al son de una banda de pueblo y siguen los ritmos de sanjuanitos, saltashpas, tonadas y pasacalles. El baile se ejecuta alrededor de las parejas de línea, que representan a los patrones; completan esta comparsa las guarichas y capariches.
La leyenda también cuenta que quienes se visten de diablos en Píllaro tienen que hacerlo por siete años consecutivos, porque pueden ocurrirle cosas extrañas. Además son siete conocidos pasos los que realiza el Diablo en su danzar. Cada enero, entonces, los diablos se toman las calles de Píllaro. Es una fiesta entre la risa y el miedo.
Esta mágica expresión cultural que se celebra entre el 1 y 6 de enero fue declarada Patrimonio Cultural del Ecuador en 2009, pues cada año miles de diablillos, en horas de la tarde, irrumpen con sus bailes y música la paz y tranquilidad de la pequeña ciudad de Píllaro en la provincia de Tungurahua, para dar paso a una verdadera fiesta a la que acuden miles de turistas nacionales y extranjeros.
Los Carnavales en Ecuador
Esta fiesta que antecede a la cuaresma se celebra de diferentes maneras en el Ecuador, de manera especial en las provincias de Azuay, Bolívar, Chimborazo, Tungurahua, Imbabura.
Una explosión de alegría y euforia se vive durante cuatro días del año, (sábado, domingo, lunes y martes, ya sea en febrero o marzo, dependiendo del Calendario Litúrgico). Durante este tiempo la gente se disfraza, participa en desfiles, baila en la calle, recita coplas, comparte con la familia y amigos. En algunos lugares aún se mantiene el juego del carnaval con agua y polvo, aunque esta costumbre poco a poco está siendo reemplazada por espumas de carnaval y picadillo de papel en todo el país. Solo en la ciudad de Ambato-Tungurahua, no se utiliza el juego con agua y más bien se desarrollan sendas exposiciones, ferias y desfiles diurnos y nocturnos, como parte de la Fiesta de la Fruta y de las Flores.
El Carnaval de Guaranda
“A la voz del carnaval todo el mundo se levanta, todo el mundo se levanta a jugar el carnaval.” Esta es la copla que más se entona cada año en las calles de Guaranda, provincia de Bolívar.
Lo más atractivo de la fiesta es el desfile, donde coloridos vestuarios y decenas de personajes ponen el toque de alegría entre los miles de turistas que los visitan. Pero más que un día especial, el carnaval de Guaranda es una celebración histórica que recuerda la tradición de los indios huarangas. Estos pueblos de la nación de los Chimbos, festejaban a su cacique durante tres días en la segunda luna llena del año.
Sus fiestas incluían cantos, bailes, comida y bebida. Hoy en día, la cultura indígena y mestiza confluye en la celebración. De acuerdo con la leyenda chamánica, el cacique líder la tribu y descendientes de los dioses tenían que imitar a la blancura de la nieve; es ahí cuando se originó la costumbre de cubrir el rostro con talco o harina.
Fiesta de la Fruta y de las flores
En la ciudad de Ambato, provincia de Tungurahua se desarrolla durante el Carnaval la Fiesta de la Fruta y de las Flores. Allí el Carnaval se celebra sin agua, lo que ha permitido que la fiesta adquiera mayor trascendencia y se convierta en un importante referente en la visita turística de América.
Comparsas, paseos nocturnos, exposiciones florales, actos artísticos, culturales, ferias artesanales, agrícolas y una feria taurina, congregan cada año a miles de turistas. La bendición de la fruta y de las flores es el punto de partida para esta gran celebración.
La fiesta de comadres y compadres
En Cuenca, capital de la provincia del Azuay se dice que durante el carnaval le “tratarán como a compadre”. El carnaval en la ciudad “Atenas del Ecuador” tiene una característica especial, pues mantiene aún algunas tradiciones; así, antes de iniciar la fiesta, se escoge al padrino o a la madrina. Este personaje (compadre y comadre) siempre es alguien importante, (famosos de la televisión, artista o persona muy conocida), no solo de la provincia, sino de cualquier otro rincón del Ecuador.
Para darle la buena noticia de que ha sido escogido como el prioste de carnaval se le lleva un presente: una guagua (niña) de pan y azúcar sobre un charol adornado con flores, globos, serpentinas, que simboliza y marca el inicio de la celebración. Esta entrega se realiza dos jueves antes del carnaval. Ya en la fiesta, especialmente en el pregón, se brinda a los visitantes mistelas (aguardiente de frutas maceradas) y guaguas de pan para estrechar la amistad. Luego los festejos continúan en las parroquias rurales de Cuenca, donde los juegos tradicionales, así como desfiles y música ponen el colofón de la fiesta.
El Chota y su festival de Coangue
El carnaval de Coangue en el Chota, provincia de Imbabura (norte del país) es uno de los atractivos de este rincón del país. Se trata del festival de música y danza a orillas del río Chota, ubicado a un costado de la vía panamericana, entre Ibarra (Imbabura) y Tulcán (Carchi). Este festival inició hace 14 años, y, convoca a miles de turistas que llegan atraídos por esta nueva propuesta de turismo etno-cultural, en el que participan miembros de 38 comunidades.
Grupos de música (bombas, muy propias del lugar), ferias de artesanías, gastronómicas, de frutas exóticas del sector como ovos, tunas, entre otros; y en las noches fuegos pirotécnicos y bailes, forman parte de la amplia oferta turística en este sector.
El Pawcar Raymi de Peguche Tío
Cada año la comunidad de Peguche ubicada al norte de Otavalo-Imbabura, vive a lo grande uno de los raymis andinos como parte del proceso histórico que experimenta, un sincretismo cultural con el carnaval occidental. Se trata del Pawcar Raymi Peguche Tío. Esta celebración inició formalmente en 1995 con el nombre de “Peguche Tío Carnaval”, tenía como eje central el Mundialito de Fútbol Indígena.
En 1999 su nombre cambió por Pwcar Raymi o Fiesta del Florecimiento, con la cual se agradece a la tierra porque los productos sembrados en septiembre del año anterior empiezan a florecer en febrero.
Carnaval por la vida, un espacio de reencuentro en Chimborazo
El carnaval es una expresión de la vida, que desde el rico sincretismo se convierte en la fiesta de la abundancia antes de la abstinencia en la cuaresma en la provincia del Chimborazo. Es una fiesta multicolor de vivencia intercultural, que cada año convoca a miles de turistas nacionales y extranjeros.
Durante los cuatro días (sábado, domingo, lunes y martes) se desarrolla en ciudades y parroquias de la provincia, una amplia programación que incluye el pregón del carnaval, concursos de bandas de pueblo, ritual ancestral Yaya Carnaval y Mama Shalva, Festival Pawkar Raymi, albazos; y, con el Jucho más grande (bebida dulce elaborada con capulíes y duraznos) buscan conquistar el paladar de los visitantes.
Semana Santa en Ecuador
La celebración de la Semana Santa en Ecuador incluye el desarrollo de varias ceremonias litúrgicas. En cada región, ciudad o localidad del país, se celebra de forma diversa. La recreación del Viacrucis; la Construcción del Monte Calvario; la Prédica de las Siete Palabras; el Descendimiento; procesiones durante toda la semana; y, finalmente la Misa de Gloria del Domingo de Resurrección, forman parte de los actos religiosos que se desarrollan desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Gloria.
Procesiones
Cristo del Consuelo en Guayaquil
La imagen del Cristo del Consuelo se venera desde hace más de 50 años en la iglesia del mismo nombre, ubicada en la intersección de las calles Lizardo García y la A, al suroeste de Guayaquil. Mide 1,80 metros aproximadamente y fue tallada por el maestro cuencano Julio Sinchi.
Baño de la Cruz en Ballenita
Desde hace décadas, el Baño de la Cruz se realiza el Martes Santo en la playa de Ballenita, provincia de Santa Elena. Lo realizan los pescadores para asegurar una buena faena durante el año y tranquilidad en las aguas.
Riobamba: Procesión del Señor del Buen Suceso
La principal celebración es la procesión del Señor del Buen Suceso que se realiza el Martes Santo, en Riobamba-Chimborazo, por las calles céntricas de la ciudad, a partir de las 15:00. Inicia desde la iglesia de La Concepción (centro de ciudad). La imagen del Señor del Buen Suceso es protegida por miembros de la Policía Nacional y de otras entidades, quienes son escogidos previamente para este fin. No faltan los santos varones, (cucuruchos), verónicas, soldados romanos, bandas de música y el pueblo católico que en gran cantidad acompaña año a año al Señor del Buen Suceso durante su procesión. El Señor del Buen Suceso, Patrono de la ciudad, fue rescatado de los escombros de la antigua Riobamba, sepultada por el fuerte terremoto de febrero de 1797.
Pichincha-Quito: El Arrastre de Caudas
El Arrastre de Caudas: ‘La purificación de los Pecados’
Cada miércoles de Semana Santa a las 12h00 se realiza en la catedral de Quito el Arrastre de Caudas una ceremonia religiosa del mundo católico que llegó a Quito en 1550. Se trata de una conmemoración fúnebre en homenaje a Cristo, que por sus tradiciones y rituales ha llegado a convertirse en una bendición para quienes participan y admiran este ritual.
Santo Domingo de los Tsáchilas/ La fiesta del Kasama
La procesión del Vía Crucis inicia en la iglesia catedral y recorre las principales calles de la ciudad hasta llegar al Santuario de Nuestra Señora de El Cisne, ubicado en el cerro Bombolí, allí se da inicio a la meditación del Vía Crucis.
Entre tanto, en la provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas se realiza la Fiesta del Kasama que es considerada por sus pobladores tsáchilas como el “inicio de un nuevo año o nuevo amanecer”.
Corpus Christi
En el Ecuador, las festividades de Corpus se celebraban en junio, con especial intensidad en la colonia, mediante grandes movilizaciones populares y coloridas manifestaciones teatrales, cuyos actores interactuaban mucho con el público. A estas representaciones culturales le seguía la música y los bailes, que generalmente duraban varios días. Elementos importantes de ésta celebración fueron los fuegos artificiales elaborados con pólvora, exaltando al fuego como elemento de demostración de júbilo. Algunas de las fiestas de Corpus se mezclaron con las ancestrales indígenas del Inti Raymi, generando una cierta fusión entre ellas y por ende cambios en los valores y prácticas originales del Inti Raymi.
Danzantes de Pujilí
El Danzante de Pujilí, considerado Patrimonio Cultural Intangible de la Humanidad desde el año 2001 es el personaje central de esta fiesta, cuyo esplendor y vistosidad cautivan a los turistas y hacen de esta celebración un acontecimiento imperdible. Este acontecimiento que se realiza en el mes de junio de cada año convoca a más de 70 delegaciones de todo el país y se caracteriza por los bailes, música de bandas de pueblo, mucho colorido y algarabía.
Inti Raymi o Fiesta del sol o “Fiesta de la segunda abundancia”
La Fiesta del Inti Raymi, fiesta del Sol o Pascua Solemne del Sol se desarrolla en junio, de cada año. Está cargada de expresiones de simbolismo ancestral y componentes de orden filosófico, religioso, político, económico y astronómico, es la manifestación del Runa- Hombre en acción de gracias al Dios sol por su bondad con la naturaleza. Su relación es matemática con el solsticio de verano, gracias al manejo exacto de los astros y su influencia sobre la agricultura, lo que denota la convergencia del tiempo y el espacio cíclico del hombre andino.
Fiesta del Yamor
Es una celebración cultural calificada como “la fiesta más alegre en la ciudad más amable del país” en la que se conjuga año tras año, la devoción a la Virgen María de Monserrate, enlazada con el agradecimiento a la Pacha Mama por la fecundidad de las tierras y por haber hecho posible las cosechas.
La fiesta nació en el barrio Monserrat, en la ciudad de Otavalo, provincia de Imbabura, aproximadamente en el año de 1952, donde tradicionalmente se festejaba para agradecer a la virgen María de Monserrat, patrona de Otavalo y a la Pacha Mama por la cosecha del maíz y el trabajo vivificante de la comarca otavaleña.
En dicha celebración se ofrecían platos y bebidas típicas, entre los que estaba la chicha del yamor. A partir de 1953 se institucionalizó denominándose la fiesta del “Yamor”.
Esta festividad se la realiza una vez al año, a finales del mes de agosto hasta la primera semana de septiembre, en donde los distintos actos y eventos tienen lugar en varios escenarios de la ciudad de Otavalo y las comunidades aledañas.
La Mama Negra
Declarada en el 2005 como Patrimonio Cultural Intangible del país, la fiesta de la “Mama Negra” que se realiza en los meses de septiembre y noviembre en la ciudad de Latacunga, provincia de Cotopaxi, es la más famosa y trascendental del Mundo Andes. Se trata de la ceremonia que cada año se ofrece a la Virgen de las Mercedes o Santísima Tragedia, la “Mama Negra”, como parte de una tradición que fusiona las culturas indígena e hispánica.
Rodeo Montubio
En las provincias costeras de Los Ríos, Guayas y Manabí se vive también en el mes de octubre la máxima expresión montubia. Tiene su origen en las faenas del herraje que se acostumbraba ejecutar en las haciendas junto con la doma de caballos y el concurso de amorfinos (coplas), al tiempo que se degustaban deliciosos platillos como el aguado de gallina y los tamales.
Fiesta del Retorno en Ibarra
Este 2017, se cumple 145 años del retorno de los sobrevivientes del devastador terremoto de 1868, el que destruyó a la Villa de San Miguel de Ibarra.
El 16 de agosto de 1868 aconteció el denominado terremoto de Ibarra, aunque afectó a toda la provincia de Imbabura, con un saldo de 20.000 muertos, aproximadamente. En la urbe, de unos 7.200 habitantes, perecieron cerca de 5.000.
La Cacería del Zorro
La Cacería del Zorro es una competencia de jinetes que se remonta a 1972, cuando algunos estudiantes de la escuela hípica fueron invitados al Rancho San Vicente de la Policía, en Quito (Pichincha). La primera Cacería se desarrolló en los espacios montañosos ubicados en lo que hoy es el sector la ‘Y’, y la avenida de la Prensa de Quito.
El primer Zorro de esta competencia fue el francés André Oviol, quien estaba radicado en el Ecuador; y el primer ganador fue Hugo Serrano, líder del grupo de estudiantes ibarreños.
Pase del Niño Viajero
Durante el 24 de Diciembre se efectúa una gran procesión, desde los barrios del Vado y San Sebastián, al oeste de Cuenca, hacia el Parque Calderón. Miles de niños, acompañados de sus padres y familiares, desfilan desde las nueve de la mañana hasta las tres de la tarde. De especial interés son los mayorales, negros, carros alegóricos, danzantes, conjuntos musicales, escenas bíblicas.
Fiesta Popular la quema del Año Viejo
En la fiesta de los años viejos en Ecuador, el personaje principal es la loca viuda. Es un hombre vestido de mujer, que se coloca junto al Año Viejo, para pedir a todo el que pasa por ahí, una “limosnita” para enterrarlo. Su coreografía a la hora de pedir la limosna es lo que ha trascendido nuestras fronteras patrias.